Lo interesante viene cuando una gran personalidad, como lo es James Cameron, conocido director por ser el más taquillero de todos los tiempos da su opinión sobre la cinta que rompió el verano. Y no es necesariamente buena...
Todas las autofelicitaciones que Hollywood se ha hecho por La Mujer Maravilla han sido tan equivocadas. Es un icono objetivizado y sólo es el viejo Hollywood machista haciendo lo mismo de siempre. No digo que no me gustara la película, pero para mí, es un paso atrás.
Pero no se detuvo ahí. El afamado director continuó explicando su postura al medio The Guardian:
Sarah Connor no era un símbolo de belleza. Era fuerte, con problemas, era una madre terrible y se ganó el respeto del público por su dureza. Para mí, [el beneficio de un personaje como Sarah Connor] es tan obvio. Es decir, la mitad del público son mujeres.
Obviamente sus declaraciones generarían controversia a tal punto de llegar a la directora Patty Jenkins quién no tardó en responder mediante Twitter.
La nula habilidad de James Cameron para comprender lo que Mujer Maravilla es, o representa, para las mujeres del mundo no es sorpresiva, pues aunque es un gran cineasta, no es una mujer.
Jenkins continuó diciendo:
Las mujeres fuertes son grandiosas. Su admiración por mi película Monster y nuestro reflejo de una mujer fuerte, pero dañada fue muy apreciado. Pero si las mujeres siempre deben ser duras, rudas y conflictivas para ser fuertes y no somos libres de ser multidimensionales o celebrar un icono de las mujeres en todos lados sólo porque es atractiva y afectuosa, entonces no hemos llegado muy lejos. Creo que las mujeres pueden y deben ser TODO tal y como deben ser los protagonistas masculinos. No existe una buena o mala versión de mujer poderosa. Y la audiencia femenina masiva que hizo el filme un éxito seguramente puede elegir y juzgar su propio reflejo del progreso.
Y así fue como se cerró la controversia. La amazona regresa a la pantalla grande en noviembre con la cinta Justice League.
¿Qué piensas de todo esto?